Nicholas Roerich - The Stronghold of Shambhala/es

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La Fortaleza de Shambhala
Shambhala


¡Lama, háblame de Shambhala!


Pero vosotros, los occidentales, no sabéis nada de Shambhala, no deseáis saber nada. Probablemente preguntáis sólo por curiosidad; y pronunciáis esta palabra sagrada en vano.


Lama, no pregunto acerca de Shambhala sin un objetivo. En todas partes, las personas conocen este gran símbolo bajo nombres diferentes. Nuestros científicos buscan el menor indicio de este notable reino. Csoma de Koros sabía algo sobre Shambhala cuando realizó su prolongada visita a los monasterios budistas. Grunwedel tradujo el libro del famoso Tashi Lama, Pal-den ye-she, referido a La Ruta a Shambhala. Sentimos que se oculta una Gran Verdad bajo símbolos secretos. Verdaderamente, el ardiente científico desea saber todo acerca de la Kalachakra.


¿Cómo puede ser ello, cuando algunos de vuestros occidentales profanan nuestros templos? Fuman dentro de nuestros sagrados santuarios; no comprenden ni desean venerar nuestra fe y nuestras Enseñanzas. Se mofan y se burlan de los símbolos cuyo significado no penetran. Si nosotros visitáramos vuestros templos, nuestra conducta sería completamente diferente, porque vuestro gran Bodhisattva, Issa, es en verdad eminente. Y ninguno de nosotros difamaría las Enseñanzas de misericordia y justicia.


Lama, sólo los muy ignorantes y estúpidos ridiculizarían vuestras Enseñanzas. Todas las Enseñanzas de justicia están como en un sitio sagrado. Y nadie que esté en su sano juicio violará los lugares sagrados. Lama, ¿por qué crees que la Enseñanza esencial del Santo es desconocida en Occidente? ¿Por qué crees que en Occidente no sabemos nada sobre Shambhala?


Lama, sobre mi mismísima mesa puedes ver la Kalachakra, la Enseñanza que trajo el Gran Athisa de la India. Sé que si un espíritu elevado, ya preparado, oye una voz que exclama Kalagiya es el llamado a Shambhala. Sabemos que Tashi Lama visitó Shambahala. Conocemos el libro del Sumo Sacerdote, T'aishan: El sendero rojo hacia Shambhala. Hasta conocemos la canción mongol acerca de Shambhala. Quién sabe, quizás incluso conozcamos muchas cosas nuevas para ti. Sabemos que hace muy poco un joven lama mongol escribió un nuevo libro centrado sobre Shambhala.


El Lama nos estudia con su mirada penetrante. Luego dice:


La gran Shambhala está mucho más allá del océano. Es el poderoso dominio celestial. No tiene nada que ver con nuestra tierra. ¿Cómo y por qué vosotros, las personas de la tierra, os interesáis en ella? Sólo en algunos sitios, en el Lejano Norte, podéis discernir los resplandecientes rayos de Shambhala.


Lama, conocemos la grandeza de Shambhala. Conocemos la realidad de este Reino indescriptible. Pero también sabemos algo de la realidad de la Shambhala terrenal. Sabemos cómo unos altos y pocos lamas fueron a Shambhala, cómo en la ruta vieron las cosas físicas habituales. Conocemos las historias del lama buriato, de cómo fue acompañado a través una galería secreta muy estrecha. Sabemos que otro visitante vio una caravana de habitantes de las montañas con sal de los lagos, en las fronteras de Shambhala. Es más, nosotros mismos hemos visto uno de los tres fuertes fronterizos de Shambhala. De modo que no me hables sólo de la Celestial Shambhala, sino también de la que está en la tierra, pues sabes tan bien como yo que en la tierra Shambhala está conectada con la Celestial. Y en este vínculo están unidos los dos Mundos.


El Lama se queda callado. Con los ojos medio ocultos por los párpados, examina nuestros rostros. Y en el ocaso de la tarde comienza su relato:


Realmente, está llegando el momento en que la Enseñanza del Santo una vez más llegará al Sur desde el Norte. La palabra de la Verdad, que comenzó su gran sendero desde Bodhigaya, regresará nuevamente a los mismos sitios. Simplemente debemos aceptarlo como es: el hecho de que la verdadera Enseñanza abandonará el Tíbet y aparecerá otra vez en el Sur. Y en todos los países se manifestarán las alianzas de Buda. En realidad, grandes cosas están llegando. Venís de Occidente, sin embargo traéis noticias de Shambhala. Debemos tomarlo muy en serio. Es probable que el rayo de la torre de Rigden Gyeppo haya llegado a todos los países.


La Luz de la Torre de Shambhala resplandece como un diamante. El está allí, Rigden Gyeppo, infatigable, siempre vigilante de la causa de la humanidad. Sus ojos nunca se cierran y en su espejo mágico ve todos los acontecimientos de la tierra. El poder de su pensamiento penetra los sitios más apartados. La distancia no existe para El; instantáneamente puede brindar ayuda a quienes sean dignos de ella. Su poderosa Luz puede destruir cualquier oscuridad. Sus inconmensurables riquezas están listas para ayudar a todo aquel que esté necesitado y se ofrezca a servir a la causa de la justicia. Hasta puede cambiar el Karma de los seres humanos…


Lama, me parece que hablas de Maitreya, ¿no es así?


¡No debemos pronunciar este misterio! Hay mucho que no puede ser revelado. Hay mucho que no puede ser cristalizado en sonido. Con el sonido revelamos nuestros pensamientos. Con el sonido proyectamos nuestro pensamiento en el espacio y el resultado puede ser el mayor de los daños. Porque todo lo que se divulga antes del momento destinado desencadena un daño incalculable. Hasta pueden provocarse las mayores catástrofes con estos actos tan atolondrados. Si Rigden Gyeppo y el Santo Maitreya son uno y el mismo para ti, que así sea. ¡Yo no lo he dicho!


Incontables son los habitantes de Shambhala. Numerosas son las espléndidas fuerzas nuevas y logros que de allí se están preparando para la humanidad…


Lama, el Vedânta nos dice que muy pronto serán entregadas a la humanidad nuevas energías. ¿Es verdad?


Innumerables son las grandes cosas predestinadas y preparadas. A través de las Sagradas Escrituras sabemos de la Enseñanza del Santo sobre los habitantes de las estrellas distantes. De la misma fuente hemos oído del pájaro de acero volador…, de serpientes de hierro que devoran el espacio con fuego y humo. Tathagata, el Santo, predijo todo para el futuro. Sabía que los ayudantes de Ridgen Gyeppo se reencarnarían a su debido tiempo; que el ejército sagrado limpiaría Lhasa de todos sus atroces enemigos; y que se establecería el Reino de la justicia.


Lama, si los grandes guerreros se encarnan, ¿acaso las actividades de Shambhala no tendrán lugar aquí, en nuestra tierra?


En todas partes, aquí y en el Cielo. Todas las fuerzas benévolas se unirán para destruir la oscuridad. Todo el que preste ayuda en esta Gran Tarea será recompensado cien veces y en esta mismísima tierra, en esta encarnación. Todos los pecadores contra Shambhala perecerán en esta encarnación porque han agotado la misericordia.


Lama, sabemos, por supuesto, que Pan-chen-rinpoche es muy estimado en todas partes. En diferentes países, no sólo entre los budistas, sino entre los pueblos de muchas naciones, hemos notado hasta qué punto favorable hablan de Su Santidad. Se dice incluso que en Sus habitaciones privadas, mucho antes de Su partida, se habían trazado en los frescos los detalles de sus futuros viajes. Y en esto sabemos que Pan-chen-rinpoche sigue las costumbres de todos los Grandes Lamas. Nos han dicho cómo durante su vuelo El y Sus seguidores escaparon a muchos de los más grandes peligros.


Conocemos que en una época sus perseguidores de Lhasa ya estaban sobre El, cuando una gran nevada les bloqueó el camino. Otro día, Pan-chen-rinpoche llegó a un lago en las montañas; se vio ante un difícil problema. Sus enemigos estaban muy cerca de El, pero para escapar, le sería necesario dar un gran rodeo por el lago. De modo que Pan-chen-rinpoche se sentó a meditar profundamente durante algún tiempo. Cuando se levantó, dio órdenes de que, a pesar del peligro, toda la caravana debería pasar la noche a orillas del lago. Entonces sucedió lo inusual: durante la noche hubo una gran helada que cubrió el lago de hielo y nieve. Antes de alba, cuando aún estaba oscuro, el Lama Tashi dio órdenes a su gente de moverse deprisa y El y Sus trescientos seguidores cruzaron el lago sobre el hielo por la ruta más corta, escapando de esta manera del peligro. Cuando los enemigos llegaron al mismo sitio, el sol ya estaba alto y sus rayos habían derretido el hielo. Sólo les quedaba rodear el lago. ¿No fue así?


Verdaderamente, así fue. Pan-chen-rinpoche recibió ayuda de la Sagrada Shambhala a lo largo de Sus viajes. Vio muchos signos maravillosos cuando cruzó las tierras altas hacia el Norte.


Lama, no lejos de Ulan-Davan vimos un enorme buitre negro que volaba bajo, cerca de nuestro campamento. Cruzó en dirección a algo resplandeciente y bello, que volaba hacia el sur sobre nuestro campamento y que brillaba bajo los rayos del sol.


Los ojos del Lama parecían echar chispas. Con ansiedad, preguntó:


¿También olisteis los perfumes de los inciensos de los templos en el desierto?


Tienes toda la razón, Lama, en el desierto pedregoso, a varios días de cualquier sitio habitado, muchos de nosotros fuimos a la vez conscientes de un exquisito vestigio de perfume. Ello sucedió varias veces. Nunca olimos un perfume tan delicioso. Me recordó a un cierto incienso que un amigo mío me dio una vez en la India. De dónde lo obtuvo, no lo sé.


Ah, estáis protegidos por Shambhala. El enorme buitre negro es vuestro enemigo, que está ansioso por destruir vuestro trabajo, pero la fuerza protectora de Shambhala os sigue en esta forma Radiante de la Materia. Esta fuerza siempre está cerca de vosotros, pero no siempre podéis percibirla. Sólo en ocasiones se manifiesta para fortaleceros y dirigiros. ¿Habéis notado la dirección en que se movía esta esfera? Debéis seguir la misma dirección. Me habéis mencionado la llamada sagrada: ¡Kalagiya! Cuando alguien oye este llamamiento imperativo, debe saber que la ruta hacia Shambhala está abierta para él. Debe recordar el año en que fue llamado, pues desde ese momento y para siempre el Santo Rigden Gyeppo le ayudará en todo. Sólo debéis saber y daros cuenta de la forma en que las personas reciben ayuda, pues muchas veces ellas rechazan la ayuda que les es enviada.


Talaï-Pho-Brang, 1928.

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